El precio del crudo sube en los mercados, pero las empresas petroleras continúan devolviendo lotes, desactivando pozos y produciendo cada vez menos. Según expertos reunidos ayer en la SNMPE, esta situación empeorará si no se toman medidas promotoras, pues todo apunta a que el problema de fondo no es el precio del petróleo, sino la ausencia de reglas claras de juego.
“Hay mucho por explorar en el país, pero las condiciones de contratación no ayudan. Prueba de ello es que las empresas han devuelto más de 20 contratos en los últimos dos años”, refiere Carlos Gonzales, gerente general de Enerconsult.
LOTES BENEFICIADOS
En esencia, la norma introduce dos nuevas reglas de juego que amplían el horizonte de inversión de las empresas petroleras.
Por un lado, extiende la vigencia de los contratos de petróleo de 30 a 40 años, posibilitando una prórroga de 20 años más, hasta cumplir los 60 años.
Y por otro, “establece regalías promocionales para inversiones en cuencas poco exploradas”, explica Eduardo Guevara, viceministro de hidrocarburos.
Según Perú-Petro, estas medidas permitirán que ocho lotes de explotación con contratos próximos a vencer tengan de 10 a 30 años más de aliento para seguir produciendo: I y V de Graña y Montero, VII-VI de Sapet, Z-2B de Savia, 8 de Pluspetrol, X de CNPC, 31B-31D de Maple y II de Petromont.
Del mismo modo, facilitarán el inicio de producción de cinco lotes, trabados por diversos motivos: 64, 67, 39, 95 y el lote 192, actualmente en proceso de transferencia a Petro-Perú.
Seferino Yesquen, presidente de Perú-Petro, estima que la ampliación de la vigencia de estos 13 contratos permitirá viabilizar US$6.547 millones de inversiones frescas en el mediano plazo, pues dichos beneficios irán ligados al cumplimiento de estrictos programas de trabajo.
“Cómo consecuencia, la producción de petróleo subirá de 48 mil a 100 mil barriles diarios hacia el 2023”, indica.
Fuente: El Comercio